Las eflorescencias -manchas blancas formadas por cristales de sales que se depositan en los ladrillos- no tienen por qué considerarse defectos de acabado si su origen estriba en la propia naturaleza de los materiales empleados; sin embargo, si su origen se debe a condensaciones o humedades evitables que comprometan la habitabilidad de la vivienda, sí podrían constituir un defecto constructivo o un vicio ruinógeno. La SAP de Guipuzoca de 21 de mayo de 2009 no las consideró vicios ruinógenos por cuanto , a pesar de deberse a la existencia de humedades en la cámara de aire, no comprometían la habitabilidad de las viviendas.
Artículos relacionados
16 noviembre, 2022
La existencia de fisuras o grietas en el pavimento del garaje de las viviendas puede…
31 julio, 2019
Humedades en vivienda, vicios ocultos No siempre una humedad es un problema grave. Las humedades…
24 abril, 2014
Si nos atenemos a la definición técnica que nos ofrece LA CONSTRUPEDIA, la fisura es la…
Posted in: RECLAMACIONES POR DEFECTOS CONSTRUCTIVOS
4 mayo, 2012
Sí. Es frecuente que las Comunidades de Propietarios no hagan correctamente una inspección anual de…
7 diciembre, 2011
A veces sucede que el arquitecto o aparejador que firma el certificado final no es…
21 julio, 2011
En casos de patologías graves y en tiempos de crisis, es frecuente que el promotor no…
22 febrero, 2011
La LOE no se aplica a las reformas salvo que alteren sustancialmente el edificio
6 febrero, 2011
Es posible demandar a la U.T.E o incluso sólo a alguna de sus integrante,s pues…